Si algunas vez has escuchado hablar de ellas, para cuando has querido darte cuenta estas palabras ya han dejado de usarse.
El embudo de conversión ya no es lo que era. Y tanto es así, pero... ¿Qué querían decir estos términos tan efímeros? ¿Qué tenían que ver con la metodología Inbound?
Seguramente estos términos puedan parecer un tanto extraños pero lo cierto es que estas palabras existen, lo que pasa es que su uso ya está extinguido. ¿Qué significan?
Son unas palabras que debes tener muy en cuenta a la hora de desarrollar tu estrategia de Inbound Marketing para saber el origen del actual ciclo que reina el tratamiento del contenido dirigido a los usuarios.
Porque claro, si estás interesado en estas lineas es porque seguramente hayas tenido las ganas de descubrir el dulce sabor de la metodología Inbound. (Es comprensible...)
Pues bien, actualmente se puede entender que el ciclo del usuario es diferente, ya que el cliente es el centro de todo el contenido que se publica en una web que sigue este tratamiento con el fin de ofrecer utilidad y calidad.
Así, las empresas para poder dar un buen servicio a sus clientes a través un contenido relevante deberán tener en cuenta cuatro fases: atraer, convertir, cerrar y deleitar.
Este ciclo de compra es necesario para que el usuario "aprenda" según las necesidades del momento.
Es comprensible que no se puede ofrecer lo mismo cuando el cliente acaba de conocer nuestra marca que cuando ese mismo ya hace dos años que compra nuestros productos a través de la red.
Este usuario en un primer lugar sería un extraño, que es cuando lo atraemos.
Más tarde visitante, momento en el cual pasa a convertirse en lead gracias las técnicas de conversión -que son medidas con el Ratio Conversion Engagement-.
Posteriormente es cliente, pasando a cerrar ese lead.
Cuando se consigue que se repitan las compras es cuando ese cliente se ha enamorado de la marca y se convierte en un promotor.
Pero hubo un tiempo en el que este ciclo era entendido de una manera diferente.
Y los términos que lo definían eran bien distintos. TOFU, MOFU... ¡Qué raro! Pero tan extraños como llenos de sentido.
¿Quieres descubrir finalmente qué significan? ¡Adelante!
En realidad simplemente se tratan de las fases del embudo de conversión que iban dirigidas a la estrategia de Inbound Marketing.
Si en todo este proceso llegamos al final habremos ganado, ahora solamente será cuestión de mantener a nuestro usuarios como clientes fieles a nuestra marca.
En cualquier caso, aunque ahora se definan con otra terminología mas detallada es igualmente conveniente fijarse en algo que tienen en común las palabras presentes con las pasadas.
En los dos casos, se insiste en ofrecer contenido diferente en casa fase del proceso para formar al cliente adecuadamente.